Nunca Lo Pediste Por Reyes #3: Cosa Nostra

La Abadía Del Crimen siempre irá ligada al nombre de Opera Soft hasta tal punto que a veces cuesta citar otros cinco títulos más de esta compañía. No cabe duda de que la obra cumbre de Paco Menéndez y Juan Delcán ha dejado actualmente en segundo plano a otros juegos que, si bien no pueden compararse en cuanto a complejidad, conservan toda la capacidad de divertirnos que antaño demostraron. 

Cosa Nostra hace de la simplicidad su mayor virtud. Lanzado a caballo entre 1986 y 1987 (dependiendo de la versión), bastan 10 segundos de juego para entender su mecánica, que no es otra que matar gangsters mientras tratas de que ellos no hagan lo propio contigo.

Para ello ningún marco mejor que el Chicago de los años 20, con su Ley Seca y sus barberías en las que nunca sabes si alguien ha pagado una sustanciosa propina al barbero para que te haga un afeitado realmente apurado… En medio de una urbe en la que nadie está seguro de ver otro amanecer, el alcalde ha contratado al detective Mike Bronco para poner fin a la carrera de los capos de la ciudad, a saber: Ruddy Bulldog, Johnny Fandango, Tony Spaguetty, Franky Frondasio y el mismísimo Padrino en persona.

No te preocupes porque aunque Mike Bronco sea detective sus métodos son más propios de Charles Bronson que de Sherlock Holmes. No dejarás de moverte sin descanso esquivando balas y disparando las tuyas, ¡pero sin malgastarlas porque no son infinitas! Por eso será imprescindible que recojas los cartuchos sobrantes que dejen los criminales caídos.

Hay nada menos que 92 pantallas que conforman una especie de laberinto con el que se representa la ciudad de Chicago. El diseño de cada una es sobresaliente porque se combinan a la perfección distintos elementos (coches de época, pasos de cebra, bocas de riego, diferentes establecimientos, zonas verdes, etc.) haciendo que cada pantalla sea reconocible por sí misma, y facilitando la labor de que el jugador memorice los distintos caminos a tomar. Al principio resulta un poco confuso el modo en que las pantallas están conectadas entre sí: por ejemplo, si sales por la izquierda puedes aparecer en la siguiente pantalla por la parte superior, pero te acostumbras enseguida.

Con un poco de práctica avanzarás un poco más en cada intento, porque ¡hablamos de un juego español que se puede acabar sin trucos! Por otro lado, como la acción principal se desarrolla en la calzada, no hay elementos que entorpezcan demasiado la visión o el movimiento del protagonista, dejando espacio suficiente para maniobrar. O lo que es lo mismo: si mueres, ¡será por tu culpa! 

Cosa Nostra tiene detalles impresionantes que redondean el producto, como poder moverte y disparar en las ocho direcciones, o la posibilidad de usar los coches aparcados como cobertura ante los disparos. El mejor piropo que puedo decir de él es que jugarlo en pleno 2015 sigue siendo un buen reto que te hará pasar un rato divertido. ¡Y tú nunca lo pediste por Reyes!